Para autónomos y pymes con tienda física u online, gestionar el inventario de forma correcta es clave para mantener el control financiero y cumplir con las obligaciones contables. Sin embargo, contabilizar las existencias puede resultar complejo, especialmente con los cambios normativos y las nuevas herramientas disponibles en 2025.
Hemos creado este artículo para ayudarte a simplificar el proceso: aquí encontrarás los métodos de valoración aceptados (FIFO, PMP, etc.), la integración con programas de gestión y algunos de los errores más comunes que debes evitar.
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Empieza ahora¿Qué son las existencias en contabilidad y por qué son clave para tu negocio?
Las existencias comprenden todos aquellos activos que una empresa posee para su venta en el curso normal de la explotación, para su transformación o incorporación al proceso productivo. Estos bienes forman parte del activo corriente del negocio y su valoración correcta resulta esencial para determinar el rendimiento económico real de la empresa
Para las pymes, las existencias suelen representar una inversión significativa que requiere una gestión meticulosa. Su impacto se extiende más allá del balance, influyendo directamente en la cuenta de pérdidas y ganancias a través de la variación de existencias, que puede generar tanto ingresos como gastos según su evolución.
La importancia de contabilizar correctamente las existencias radica en su relación directa con el ciclo de explotación de la empresa. Una valoración inadecuada puede distorsionar los resultados, comprometer la capacidad de autofinanciación y generar problemas con la normativa fiscal.
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¿Qué dice la normativa española sobre la contabilidad de stocks?
El Plan General de Contabilidad (PGC) establece el marco normativo para la contabilización de existencias en España. La norma de registro y valoración 10ª regula específicamente este aspecto, estableciendo qué se considera existencias y cómo deben valorarse, permite el método del Precio Minorista y exige el reconocimiento de deterioro si el valor de mercado es inferior al coste.
Para las pymes, resulta especialmente relevante el Plan General de Contabilidad de Pequeñas y Medianas Empresas, que simplifica ciertos aspectos sin comprometer la fiabilidad de la información financiera. Esta normativa específica facilita la gestión contable sin renunciar a la calidad en la presentación de los estados financieros.
La regulación actual establece que las existencias deben valorarse por su precio de adquisición o coste de producción, aplicando posteriormente los métodos de asignación de valor permitidos.
Además, la contabilización de existencia también aparece mencionada en el Código de Comercio (que establece la obligación de llevar una contabilidad ordenada y de realizar inventario una vez al año) y en la Ley 27/2014 de Impuesto sobre Sociedades, que habla sobre la valoración de la existencias.
Tipos de inventario y sus cuentas contables
El Grupo 3 del Plan General Contable clasifica las existencias en diferentes subgrupos según su naturaleza y destino. Esta clasificación resulta fundamental para realizar un registro contable preciso y cumplir con los requisitos informativos.
Cuenta 30: mercaderías (empresas comerciales)
Las mercaderías constituyen bienes adquiridos por la empresa para su venta sin transformación alguna. Esta cuenta resulta especialmente relevante para empresas comerciales que actúan como intermediarias entre proveedores y clientes finales.
Su registro debe reflejar el valor de adquisición, incluyendo transportes, aranceles, seguros y otros gastos directamente relacionados con la compra. Los descuentos comerciales se deducen del importe facturado, mientras que los descuentos por pronto pago se contabilizan separadamente.
Cuenta 31: materias primas (empresas industriales)
Las materias primas comprenden aquellos elementos que, mediante elaboración o transformación, forman parte de los productos fabricados. Su valoración incluye todos los costes necesarios para su puesta en condiciones de utilización.
Para las empresas industriales, el control de materias primas resulta crítico para determinar el coste de producción real. Su correcta valoración afecta tanto al valor de los productos terminados como a la determinación de los márgenes de beneficio.
Cuenta 32: otros aprovisionamientos
Esta cuenta engloba elementos auxiliares como combustibles, repuestos, embalajes, envases y material de oficina. Su tratamiento contable varía según su naturaleza y ciclo de utilización.
Los repuestos con ciclo de almacenamiento inferior a un año se incluyen en esta cuenta, mientras que aquellos con mayor durabilidad pueden considerarse inmovilizado material. Esta distinción resulta crucial para la correcta presentación en el balance.
Métodos para valorar tus existencias: ¿FIFO, PMP u otro criterio?
La elección del método de valoración de existencias constituye una decisión estratégica que afecta tanto a los resultados como a la carga fiscal. El Plan General Contable permite la utilización de diferentes criterios, siendo los más comunes el FIFO y el precio medio ponderado.
FIFO: cómo aplicarlo en contextos inflacionarios
El método FIFO (First In, First Out) asume que las primeras existencias en entrar son las primeras en salir. En contextos inflacionarios, este criterio tiende a valorar las existencias finales a precios más actuales, incrementando el valor del activo.
Su aplicación resulta especialmente recomendada para productos perecederos o con riesgo de obsolescencia, ya que refleja mejor la realidad física del movimiento de mercancías. Sin embargo, puede generar una mayor carga fiscal en periodos de inflación.
Precio medio ponderado: la fórmula más equilibrada
El precio medio ponderado (PMP) calcula el coste promedio de las existencias considerando las cantidades y precios de cada entrada. Este método ofrece una valoración más estable y neutral ante fluctuaciones de precios.
La fórmula es:
PMP = (Valor existencias iniciales + Valor compras del periodo) / (Unidades iniciales + Unidades compradas) |
Su principal ventaja radica en que suaviza las oscilaciones de precios, proporcionando una base más estable para la toma de decisiones. Resulta especialmente útil cuando los precios de compra fluctúan significativamente.
¿Por qué el LIFO está prohibido en España?
El método LIFO (Last In, First Out) está prohibido en España por no reflejar adecuadamente el flujo real de mercancías. Esta restricción se alinea con las directrices internacionales que priorizan la imagen fiel de la situación patrimonial.
La prohibición del LIFO evita manipulaciones contables que podrían distorsionar la realidad económica de la empresa, especialmente en contextos inflacionarios donde este método podría infravalorar artificialmente los resultados.
Registro diario vs. cierre anual: paso a paso con asientos contables
La contabilización de existencias sigue el método especulativo, registrando las operaciones en cuentas de compras y ventas durante el ejercicio, para realizar posteriormente los ajustes necesarios al cierre.
Durante el ejercicio, las compras se registran en la cuenta 600 (Compras de mercaderías) y las ventas en la cuenta 700 (Ventas de mercaderías). Este sistema permite un seguimiento más eficiente de la actividad operativa sin complicar excesivamente el registro diario.
Al final del ejercicio, se procede a regularizar las existencias mediante asientos que ajustan el saldo de las cuentas del Grupo 3 para reflejar el inventario real. Este proceso requiere un recuento físico o inventario que determine las existencias finales.
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Regularización de existencias: asientos clave al cierre del ejercicio
La regularización de existencias constituye uno de los procesos más críticos del cierre contable, ya que su correcta ejecución garantiza que los estados financieros reflejen fielmente la situación patrimonial de la empresa.
Tratamiento contable de la variación de existencias
El asiento de regularización implica dar de baja las existencias iniciales y dar de alta las existencias finales. La diferencia entre ambos importes constituye la variación de existencias, que se registra en las cuentas del Grupo 61.
Si las existencias finales superan a las iniciales, se genera un ingreso por variación de existencias. En caso contrario, se produce un gasto que reduce el resultado del ejercicio.
¿Cómo impacta la variación de existencias en la cuenta de pérdidas y ganancias?
La variación de existencias afecta directamente al resultado del ejercicio, modificando el cálculo del beneficio o pérdida. Su impacto debe analizarse en el contexto de la estrategia empresarial y los objetivos de gestión.
Un incremento de existencias puede indicar una mejora en la capacidad productiva o un problema de ventas, mientras que una disminución puede reflejar una mayor eficiencia operativa o dificultades de aprovisionamiento.
Correcciones valorativas: cómo registrar deterioros de stock
Cuando el valor neto realizable de las existencias resulta inferior a su coste de adquisición o producción, debe procederse a realizar correcciones valorativas que reflejen esta depreciación.
Cómo calcular el valor neto realizable (con ejemplo práctico)
El valor neto realizable representa el importe que se puede obtener por la venta de las existencias, deduciendo los costes estimados para su enajenación. Su cálculo requiere considerar factores como obsolescencia, daños o cambios en la demanda.
Si tus existencias tienen un coste de 10.000 euros pero su valor de mercado es de 8.000 euros, el deterioro asciende a 2.000 euros, que debes registrar como gasto del ejercicio. |
¿Cuándo utilizar las cuentas 693 y 393?
La cuenta 693 (Pérdidas por deterioro de existencias) registra el gasto por deterioro al cierre del ejercicio, cuando las existencias (materias primas, productos en curso, mercaderías, etc.) han perdido valor y su valor neto realizable (precio de venta estimado menos costes de venta) es inferior a su coste de adquisición o producción.
También se utiliza cuando las existencias están obsoletas, dañadas o han sufrido mermas no justificadas.
Por su parte, la cuenta 393 (Provisión por deterioro de existencias) actúa como compensadora del activo, es decir, reduce el valor contable de las existencias en balance y equivale a una “provisión” para reflejar que el valor real de las existencias es menor que su coste original.
Esta cuenta se utiliza siempre que se reconozca una pérdida por deterioro (con la cuenta 693) y se puede revertir ejercicios posteriores si las circunstancias que causaron el deterioro desaparecen (por ejemplo, si de nuevo aumenta el valor de mercado). En este caso se utilizaría la cuenta 793 (Reversión del deterioro de existencias).
¿En qué se diferencian las normas contables y las normas fiscales?
El tratamiento fiscal de las existencias puede ser distinto del contable, especialmente en aspectos como la deducibilidad de deterioros o la aplicación de diferentes métodos de valoración.
Es fundamental conocer las particularidades del Impuesto sobre Sociedades respecto a las existencias, especialmente en lo referente a ajustes extracontables y diferencias temporarias que puedan surgir.
Por lo que respecta a la valoración de las existencias, solo son fiscalmente deducibles los costes directos y una parte de los indirectos, según criterios de imputación razonable. Por el contrario, no son incluibles los gastos financieros.
En cuanto al deterioro de las existencias, se puede deducir del Impuesto sobre Sociedades cuando se trata de una pérdida irreversible que, además, puede justificarse de forma objetiva (por ejemplo, por obsolescencia, daños físicos o caída drástica de precios).
En cualquier caso, el valor fiscal no puede ser inferior al valor neto realizable (precio de mercado menos gastos de venta) y, en caso de que en ejercicios posteriores se recupere el valor, este tributará como ingreso.
Casos prácticos de contabilización de existencias
Pero la teoría no siempre resulta tan sencilla de comprender como la práctica. Por eso, a continuación te ofrecemos varios ejemplos que ilustran las diferentes situaciones de contabilización de existencias que pueden presentarse en la gestión empresarial.
Empresa comercial con mercaderías
Una empresa comercial inicia el ejercicio con mercaderías valoradas en 50.000 euros. Durante el año realiza compras por 200.000 euros y al cierre, el inventario físico arroja un valor de 60.000 euros.
La variación de existencias será: 60.000 – 50.000 = 10.000 euros (ingreso). |
Empresa industrial con materias primas
Una empresa industrial gestiona materias primas valoradas inicialmente en 30.000 euros. Las compras del ejercicio ascienden a 150.000 euros y las existencias finales se valoran en 25.000 euros.
La variación será: 25.000 – 30.000 = -5.000 euros (gasto). |
7 errores comunes al contabilizar existencias (y cómo solucionarlos)
La contabilización de existencias, ya hablemos de mercaderías, materias primas o productos en curso o terminados, puede generar problemas fiscales y desajustes financieros si no se maneja correctamente. Estos son algunos de los errores más frecuentes y cómo evitarlos:
- Confiar solo en los registros contables sin verificar el stock real con un inventario anual. Recuerda que el art. 36 del Código de Comercio exige hacer un recuento físico obligatorio de forma periódica (al menos, una vez al año). Utiliza herramientas de gestión (ERP, códigos de barras) para reducir discrepancias.
- Valorar las existencias de forma incorrecta, ya sea por incluir gastos no deducibles (como los financieros) en el coste de producción o por utilizar métodos no permitidos, como es el caso de LIFO en España. Solucionarlo es tan sencillo como excluir los costes financieros del valor fiscal y aplicar únicamente métodos permitidos, como FIFO o coste medio ponderado.
- No ajustar el valor cuando hay pérdidas (como obsolescencia o caída de precios) en las cuentas contables 693 y 393. Recuerda que debes revisar anualmente el valor neto realizable (precio de mercado – gastos de venta) y contabilizar el deterioro en la 393.
- Tratar igual el deterioro contable y fiscal, es decir, las diferencias contables y las fiscales. Hacienda suele ser más restrictiva, por lo que es recomendable llevar un registro paralelo de ajustes fiscales (como los deterioros no deducibles) y justificar las correcciones con informes de mercado.
- Dar por válidas las pérdidas de stock, como mermas o roturas, sin justificación. Lo correcto es documentar las mermas con informes técnicos, para que sean deducibles, y utilizar los seguros para cubrir robos o siniestros.
- Contabilizar mal las existencias en curso, sin imputar correctamente los costes directos e indirectos a los productos semiterminados y olvidando el criterio de proporcionalidad en los trabajos en curso. Este error puede solucionarse asignando los costes con un sistema fiable, como ABC o por procesos. Revisa la NRV 10ª del PGC para productos en curso.
- No cuadrar las entradas y salidas de productos o materias con facturas o albaranes. Debes implementar un sistema de trazabilidad, con entradas y salidas automatizadas, y revisar periódicamente facturas pendientes de contabilizar.
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Preguntas frecuentes
¿Cómo Registrar Existencias Obsoletas?
Las existencias obsoletas deben valorarse por su valor neto realizable, registrando el correspondiente deterioro si es inferior al coste. En casos de obsolescencia total, procede la baja completa del activo.
¿Qué método de valoración reduce impuestos?
No existe un método universalmente óptimo desde el punto de vista fiscal. La elección debe basarse en las circunstancias específicas de cada empresa y sus objetivos estratégicos, considerando tanto el impacto fiscal como la imagen fiel del patrimonio.
La correcta contabilización de existencias requiere conocimiento técnico, coherencia en la aplicación de criterios y coordinación entre áreas. Su dominio resulta fundamental para la gestión eficiente de cualquier empresa que maneje inventarios.